martes, 27 de agosto de 2019

Desde nuestra libertad




Comienza la mañana, te hablo y tu compañía silenciosa, da paso a tu presencia.

Frente a mí, soplas y tu aire llena mis velas de amor para navegar por el mar de la Vida

Sé que, si te busco, si no pierdo tu mirada, todo mi día respirará ese amor porque Tú no puedes renunciar a quien eres.

Pero nos hiciste aves con las alas extendidas para que voláramos por el cielo de nuestra libertad.

Y el día pasa,  volamos en el aire de nuestros pensamientos que, a veces, tantas veces no son los tuyos. 

Tú nos miras, recordando nuestro encuentro esta mañana y nos dejas que volemos, que acertemos y que nos equivoquemos, que regresemos y te busquemos de nuevo, pero siempre desde nuestra voluntad, desde nuestra libertad.

Volar cada día con la huella de tu presencia en nuestro corazón, con el sonido de tu Palabra en nuestro interior. 

Explorar el mundo, descubrir la vida, actuar y ser para saber que, a nuestro regreso, estarás Tú aguardando nuestra vuelta.

Tú, esperando a escuchar nuestro paso por el mundo, nuestras idas y venidas, con las dos manos abiertas para poder recostarnos  y después de descansar, preparar juntos el vuelo que nos espera mañana. 

(Olga) 
comunidadmariamadreapostoles.com


No hay comentarios:

Publicar un comentario