Jesús está de paso por Betania y
decide visitar a las hermanas de su amigo Lázaro, Marta y María, atentos a la
reacción de cada una de ellas. Marta considera prioritario hacer primero las
cosas de la casa. No se detiene a pensar que no se acaba el mundo si ese día
que el Señor ha ido a visitarlas, se come más tarde, la ropa para lavar se deja
para el día siguiente...etc. En definitiva; le falta discernimiento para
ordenar su jerarquía de valores, no sabe priorizar las cosas de Dios por
encima de las suyas. Marta es una mujer buena, pero aún no es capaz de valorar,
que Jesús es la Presencia de Dios en su casa.
Sabemos que a su muerte fue
canonizada...pero a estas alturas aún "es más de la tierra que del
Cielo".
Los Discípulos de Jesús vivimos, con
los pies en el suelo, pero con la cabeza en el Cielo.
En el próximo texto veremos a María su hermana.
P. Antonio Pavía
comunidadmariamadreapostoles.com

No hay comentarios:
Publicar un comentario