Repite el capítulo 22
del libro 2º de Samuel. Un rey, David en el libro de Samuel, ha tenido una gran
victoria sobre los enemigos y la atribuye totalmente a Dios; hasta en los
versos en que habla en primera persona, “persigo. . . quebranto. . . los machaco.
. . los extermino. . .” es siempre porque “Dios me da pies de gacela . . . me
adiestra para la guerra . . . a mis adversarios les hace dar la espalda.”
Este sentimiento tan
hermoso de atribuírselo todo a Dios está expresado con la mentalidad primitiva
de su tiempo. Entonces no había todavía una conciencia de que todos somos hijos
e iguales ante Dios; los extranjeros eran enemigos, nuestros y de Dios; había
que quebrantarlos, machacarlos, matarlos. Ahora ya no podemos pensar así.
Puedo pensar que yo soy el
rey y que mi guerra es contra los enemigos del alma.
PARÁFRASIS DEL SALMO 18
(17)
1. Declaración de amor
2 Yo te amo, Señor, mi
fortaleza Te quiero con todo mi corazón,
3 Señor, mi roca y mi
baluarte, Tú eres el que das pleno sentido
mi liberador, mi
Dios; a mi vida. Contigo me siento
mi escudo y cuerno de mi
salvación siempre joven y lleno de energía.
mi ciudadela y mi
refugio. Tu amor me hace emprendedor.
4 Invoco al Señor, que es digno de
alabanza, Y hasta mis fracasos los conviertes
y quedo a salvo de mis
enemigos. en estímulos de nuevos esfuerzos.
2. Te necesito
5 Las olas de la muerte me
envolvían, Sin ti yo no valgo para nada.
me espantaban las trombas de
Belial, Todo me da miedo, todo me parece
6 los lazos del Seol me
rodeaban, imposible. Todo mi esfuerzo es vano
me aguardaban los cepos de la
Muerte. para el tiempo tan corto que voy a vivir.
7 Clamé al Señor en mi
angustia, Pero acudo a ti y todo cambia de color.
a mi Dios
invoqué; Tú siempre tienes tiempo para mí
y escuchó mi voz desde su
Templo, y respondes a mis llamadas de auxilio.
resonó mi llamada en sus
oídos. ¿Es que te agrada el sonido de mi voz?
3. Teofanía. Eres impresionante.
8 La tierra fue sacudida y
vaciló, Me siento incapaz
retemblaron las bases de los
montes de competir con la
vacilaron bajo su
furor, descripción tan
9 una humareda subió de sus
narices, maravillosa que el salmista
y de su boca un fuego que
abrasaba, hace de ti, aunque está en
de él salían carbones
encendidos. lenguaje primitivo.
10 Él inclinó los cielos y
bajó Aunque yo sé que todo es pura poesía,
un espeso nublado bajo sus
pies; me deleita verte cabalgando sobre
11 cabalgó sobre un querube, emprendió
el
vuelo un querube y volando
sobre las alas de los vientos
planeó. sobre las alas de los vientos,
12 Se puso como manto un cerco de
tiniebla, haciendo de las tinieblas tu manto,
como tienda un oscuro aguacero, y nubes
espesas; tu tienda de nubes y lluvia,
13 el furor de su rostro
despedía infundiendo terror,
granizo y ascuas de
fuego. granizando ostentosamente,
14 Tronó el Señor en los
cielos.
y tronando,
Lanzó el Altísimo su
voz; y gritando.
15 arrojó saetas y los puso en
fuga, arrojando saetas que ponían en fuga,
rayos fulminó y sembró
derrota. y rayos que sembraban derrota,
16 El fondo del mar quedó a la
vista, secando el mar y
los cimientos del orbe
aparecieron, dejando ver los cimientos de la tierra
al estruendo, Señor, de tu
bramido, ante tu voz poderosa
al furioso resoplar de tus
narices. y el hincharse de tus narices.
4. Me amas y me salvas
17 Él extiende su mano de lo alto para
asirme, ¡Me da tanta alegría el saber que tú
para sacarme de las profundas
aguas; me amas! Me sacaste del abismo de la
18 me libera de un enemigo
poderoso, nada, y me libras del más poderoso
de mis adversarios más fuertes que
yo. de todos los enemigos, la muerte.
19 Me aguardaban el día de mi
ruina, La muerte me mira con sus fauces
mas el Señor fue un apoyo para
mí, abiertas para devorarme,
20 me sacó a espacio
abierto, pero tú se las cierras
me salvó porque me amaba porque me amas.
5. Así quieres tú que yo sea.
21 el Señor me recompensa conforme a mi
justicia, Me quieres santo como tú eres,
me paga conforme a la pureza de mis
manos; puro de corazón y de manos,
22 porque he guardado los caminos del
Señor, siguiendo siempre tu inspiración,
y no he hecho el mal lejos de mi
Dios. y sin hacer mal a nadie.
23 Porque tengo ante mí todos sus
juicios, Con deseos de saber siempre lo que
y sus preceptos no aparto de mi
lado; quieres de mí, y obedecerte de corazón.
24 he sido ante él
irreprochable, Sin tener nada que ocultar, nada que
y de incurrir en culpa me he
guardado. no se pueda sacar a la plaza pública.
25 Y el Señor me devuelve según mi
justicia, Tú te complaces en el que así obra,
según la pureza de mis manos que tiene
ante sus
ojos. te gusta ver a tus hijos
limpios de toda maldad.
26 Con el piadoso eres
piadoso, Tú te apiadas del que se apiada,
intachable con el hombre sin
tacha. tú que estás sin culpa no ves en mí culpa.
27 Con el puro eres
puro Con el transparente eres transparente,
con el ladino,
sagaz; pero nadie te engaña con falsas pretensiones.
28 tú que salvas al pueblo
humilde, Ensalzas al humilde
y abates los ojos
altaneros. y humillas al soberbio.
6. Contigo todo lo puedo
29 Tú eres, Señor, mi lámpara, Tú iluminas mi camino,
mi Dios que alumbra mis
tinieblas; me haces andar sin tropezar.
30 con tu ayuda las hordas
acometo, Contigo a mi lado venzo las tentaciones
con mi Dios escalo la
muralla. y escalo montañas.
31 Dios es perfecto en sus
caminos, El camino que me trazas lleva a la
la palabra del Señor es
acrisolada. perfección, tu palabra a la santidad,
es escudo de cuantos a él se
acogen. contigo no hay nada que temer.
32 Pues ¿quién es Dios fuera del
Señor? Que nadie se atreva a considerarse
¿Quién Roca sino sólo nuestro
Dios? como tu igual. Nadie puede ofrecer
33 El Dios que me ciñe de
fuerza la seguridad que tú ofreces. Tú me
y hace mi camino
irreprochable, infundes ánimo, y contigo voy por buen camino.
34 que hace mis pies como pies de
cierva, A tu lado me siento más ligero que
y en las alturas me sostiene en
pie, una gacela, no me asustan los montes,
35 el que mis manos para el combate
adiestra me siento fuerte contra la tentación
y mis brazos para tensar el arco de
bronce. y animoso para afrontar las dificultades
de la vida.
36 Tú me das tu escudo
salvador, ¡Me siento tan seguro con tu favor!
tu diestra me sostiene, tu cuidado me
exalta, vibran de alegría mis entrañas,
37 despejas mis caminos ante
mí se hacen llanos mis caminos,
y no desfallecen mis
pies. corro y salto sin temor a hacerme daño.
7. En la refriega
38 Persigo a mis enemigos, les doy
caza, Contigo me atrevo a enfrentarme con
no vuelvo hasta haberlos
acabado; las tentaciones, no les doy tregua,
39 los quebranto, no pueden
levantarse, las trituro bajo mis pies,
sucumben debajo de mis
pies. quedan reducidas a la nada.
40 Para el combate, de fuerza me
ciñes, Me haces fuerte contra el pecado,
doblegas ante mí a mis
agresores, contra las sugerencias a hacer el mal.
41 a mis enemigos haces dar la
espalda, No hay quien pueda extraviarme,
extermino a los que me
odian. tapo la boca al que me invita a pecar.
42 Claman, mas no hay
salvador, El maligno nunca me vencerá,
Al Señor y no les
responde. porque no puede contar con tu ayuda,
43 Los machaco como polvo que se lleva
el
viento, tendrá que marchar con el rabo
como el barro de las calles los
piso. entre las piernas como una alimaña.
8. Pensemos en el
triunfo de Jesús en la Cruz.
“Me he hecho
irresistible” (Jn 12,32)
44 Me libras de las contiendas de mi
pueblo, Libraste a Jesús de la muerte,
me pones a la cabeza de las
gentes, y le hiciste rey del universo, hasta
pueblos que no conocía me
sirven. los pueblos que no le conocían
ahora le sirven con entusiasmo.
45 Los hijos de extranjeros me
adulan, Los gentiles acuden a él en tropel,
son todo oídos, me
obedecen, le obedecen todos con alegría,
46 los hijos de extranjeros se
amedrentan se le acercan con tímida esperanza
y dejan temblando sus
refugios. y se desarman ante la confianza
que él les infundes.
9. Himno de Acción de Gracias a Dios:
En nombre del hombre Jesús; su muerte en la Cruz fue
su victoria
47 ¡Viva el Señor, bendita sea mi
Roca,
Gracias, Dios mío,
el Dios de mi salvación sea
ensalzado, mi campeón
48 el Dios que me dio el
desquite porque me has dado el triunfo,
y me sometió los
pueblos. y me has hecho rey de todos los pueblos.
En mi nombre
49 Tú me libras de mis
enemigos, Tú me has hecho vencedor de mis tentaciones,
me exaltas sobre mis
agresores, me has sacado del pecado,
del hombre violento me
salvas. y has derrotado a mis malas pasiones.
En nombre de todos
50 Por eso he de alabarte entre los
pueblos, Que todos los pueblos se unan a
a tu nombre, Señor,
salmodiaré. mi alabanza cantando y tocando
51 Él hace grandes las victorias de su
rey los instrumentos, a ti que haces glorioso
y muestra su amor a su
ungido, a tu hijo Jesús, nos dejas ver cuánto le amas,
a David y a su linaje para
siempre. y nos invitas a amarle como tú para siempre.
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