Otra vez el
problema de por qué los malos prosperan mientras que los buenos sufren. El
Salmo va más allá del dicho de que “La virtud es su propio salario”, dice que
la cercanía de Dios es el premio, no el salario, de la virtud.
1 Salmo de Asaf
SALMO
PARÁFRASIS
Empieza con una profesión de fe en el amor de Dios a los buenos.
1 ¡Qué
bueno es Dios para los hombres
virtuosos, Es
claro que el buen Dios no
para los limpios de
corazón!
puede por menos de premiar a los
buenos y a los de corazón sincero.
Pero confiesa que le costó trabajo ver la justicia de Dios cuando
consideraba
lo bien que les sale todo a los malvados.
2 Pero
por poco se desvían mis pasos,
Sin embargo tengo que admitir
poco faltó para que se resbalaran mis
pies,
que me costó trabajo entenderlo;
3 pues
tenía envidia de los
impíos,
parecía que los premiados eran los
viendo la prosperidad de los
malvados.
malos, a quienes yo veía prosperar
más que las personas honestas.
4 Ellos
no pasan
agobios,
No se amargan la vida, se alimentan
su cuerpo está sano y
robusto,
bien y engordan; se lo toman todo con
5 no
conocen las fatigas de los
hombres,
calma, y no se angustian por lo que
ni sufren tribulaciones como los
demás.
puedan hacer sufrir a los hermanos.
6 Y eso
que su collar es la
soberbia,
Se sienten orgullosos y autosuficientes,
y la violencia el manto que los
cubre,
son duros con sus subordinados,
7 la
maldad se les sale por los
poros,
respiran tacañería y maldad, su
su corazón rebosa de malos
propósitos.
corazón no cesa de urdir asechanzas.
8 Se
mofan, hablan con
maldad,
Se burlan de los que tienen “la debilidad”
hablan con altivez y
prepotencia,
de ser buenas personas; ellos no se
9 su
boca ofende a Dios que está en el
cielo,
dejan engañar; nada les importa
sus labios a los hombres que viven en la
tierra.
ni de Dios ni de los hombres.
El ver a los malvados así triunfantes es una tentación para la gente
superficial
10 Por
eso, hasta el pueblo de Dios los
sigue,
La tentación de imitarles es muy
y bebe a raudales su
doctrina.
fuerte, los superficiales les admiran,
11 Pues
dicen: “¿Cómo va a saberlo
Dios? dicen:
“A Dios todo le da lo mismo,
¿Cómo lo va a conocer el
Altísimo?”
no se molesta en considerar nuestra
12 Así
son los
malvados:
pequeñez. Así es como uno debe ser,
viven tranquilos y acumulan
riquezas.
vivir sin angustias, y atesorar
riquezas de la tierra”.
13 Entonces,
¿De qué me
sirve
¿De qué le sirve a uno obrar el bien y abs-
haber guardado limpio el
corazón
tenerse del mal si a todos nos trata igual?
y haber mantenido mis manos
inocentes?
¿para qué pasar angustias
14 ¿De qué me sirve el haberme
y sacrificarse, y
mortificado todos los
días
abstenerse de la fruta
y haberme corregido cada
mañana?
que llaman prohibida?
Por más que buscaba una explicación no podía encontrarla con mi propio
talento.
15 Si
hubiera dicho: “Hablaré como
ellos”
Yo sabía que no podía pensar así,
habría traicionado la estirpe de tus
hijos.
no hubiera sido digno de ti. Pasé
16 Así
que me puse a pensar para
entenderlo,
horas y horas tratando de
pero me resultaba muy
difícil.
entender, pero todo fue inútil.
Hasta que un día Dios me abrió los ojos. Fue el día en que me hizo
encontrar
el inmenso placer encerrado en el dicho “Jugando en todo momento
en la presencia de Dios”. Los malvados, a pesar de sus triunfos, son
dignos de compasión, porque están alejados del Dios que nos hace felices.
17 Hasta
que entré en los secretos de
Dios,
Hasta que un día me hiciste
y comprendí el destino que los
aguarda.
entender, y comprendí
lo desgraciados que son los impíos.
18 Sí,
tu los colocas en el
resbaladero,
No saben apreciar lo que realmente
los precipitas en la
ruina.
vale, se revuelcan en el lodo de la
19 ¡Qué
pronto quedan hechos un
horror
tierra. Un día comprenderán su error
desaparecen consumidos de
espanto!
y se encontrarán con las manos vacías.
20 Como
un sueño que se desvanece al
despertar,
Todo había sido
Señor mío,al despertar despiertas sus
sombras.
vano, nada valían sus riquezas.
21 Cuando
la amargura me invadía el
corazón,
Cuando yo los envidiaba, cuando
cuando me torturaba en mi
interior
me recomía por dentro al verlos
22 era
un estúpido y no lo
comprendía,
prosperar, estaba siendo tan tonto
era como un animal ante
ti.
como ellos, no comprendía tu sabiduría.
El estar siempre con Dios vale más que todos los tesoros y triunfos de la
tierra.
23 Pero
yo estaré contigo siempre,
El vivir siempre en tu presencia,
tú me tomas de la
mano,
y dejarme guiar por tu sabiduría,
24 me
conduces según tus
planes,
y caminar por tus caminos
y después me llenas de
gloria.
es lo más grande que se puede soñar.
25 ¿A
quién tengo yo en los cielos sino a
ti?
Teniéndote a ti, no necesito
Si estoy contigo ya no encuentro gusto en
la tierra.
ningún otro tesoro.
26 Aunque
todo mi ser se
consuma,
Aunque todo lo pierda
Dios es mi heredad y mi roca para
siempre.
te tengo a ti que lo eres todo.
27 Los
que se apartan de ti perecen,
Si te pierdo a ti me quedo sin nada,
tú exterminas a los que te
traicionan.
el que te abandona se vuelve nada.
28 Por
eso mi felicidad consiste
La felicidad que ansío es la de estar
en estar junto a Dios.
siempre jugando en tu presencia.
Me refugiaré en ti,
Señor
Que nunca me aparte de ti,
y proclamaré tus maravillas
que sepa proclamar tus maravillas
a las puertas de la ciudad de
Sión.
delante de todos mis hermanos.
P. Santiago Alonso Vega