lunes, 20 de octubre de 2025

Partiendo la Palabra Sl 45 XIII "Mis Palabras son Espíritu y Vida" (Jn 6,63b)

 

 

 Hemos hablado ampliamente de Aquel que es el   más bello de los hombres, Aquel que de sus labios brota la Gracia, la Palabra.

El Salmista, inspirado por Dios, nos dice que este hombre está listo para un combate. Es una profecía sobre la Encarnación del Hijo de Dios, que mantendrá el combate de la Verdad, contra el engaño, contra Satanás, llamado por Jesús, el padre de la mentira (Jn 8,44). Un combate contra el Embaucador que busca degradarnos    hasta el escarnio más profundo haciéndonos creer que no tenemos alma, y si no tenemos alma, no somos más que un conglomerado de huesos, músculos, tendones...etc., regados por sangre.

Un engaño así, tan destructivo, provoca la compasión de Dios, de ahí la profecía alegórica que nos presenta al Mesías en estos y parecidos términos: "Cíñete noble guerrero, cabalga victorioso por la verdad y la justicia..." 

 

P. Antonio Pavía

comunidadmariamadreapostoles.com

viernes, 17 de octubre de 2025

Partiendo la Palabra Domingo Mundial de las Misiones.

 


 Hoy celebramos la misión confiada por Jesús, el Hijo de Dios de anunciar el Evangelio, sus Palabras de Vida Eterna, a todos los hombres del mundo. Hay quienes plantean si este anuncio universal no está desfasado, ya que todas las religiones tienen huellas de Dios como leemos en Jn 1,9. Es cierto que los caminos de Dios son muchos, pero no podemos privar a nadie de las Palabras de Vida Eterna proclamadas por Jesús en el Evangelio (Jn 6,67-68...).

Palabras que tienen la Fuerza de Dios y que hacen de nosotros hombres nuevos como dice San Pablo (2 Co 5,17).

 Palabras de Vida que nos rescatan de tantas taras que nos oprimen.

 Palabras que crean el Discipulado. A todos alcanza este rescate de Dios.  Innumerables y más que innumerables son los rescatados a lo largo y ancho del mundo. 

 Conocemos a algunos de ellos, empezando por los Apóstoles, a los que siguen una lista interminable de hombres y mujeres que al escuchar el Evangelio depositaron en sus Palabras toda su esperanza. Esta liberación universal de toda atadura, es lo que celebramos este Domingo.

 

P. Antonio Pavía 

comunidadmariamadreapostoles.com

miércoles, 15 de octubre de 2025

Partiendo la Palabra Sl 45 (XII) "Mis palabras son espíritu y vida " (Jn 6,63b)

 

 "En tus labios se derrama la gracia" dijo el salmista, viendo a lo lejos, con los ojos del corazón, como diría San Pablo (Ef 1,16-18) al Mesías.

Decir que Jesús y también sus Discípulos de todos los tiempos, ofrecerían al mundo, Palabras de Gracia, lleva consigo la promesa de que encendería en quienes acogieran su Evangelio, el Fuego de Dios. Tengamos en cuenta, por ejemplo, que Dios confío a Moisés la misión de liberar, en su Nombre, a Israel, esclavo en Egipto, desde una zarza ardiente. ( Ex 3,1...).

 Por otra parte, los dos discípulos de Emaús desanimados e incrédulos acerca de la resurrección de Jesús, fueron recuperados por Él, cuando abandonaron la Comunidad de Jerusalén. Salió a su encuentro y les " partió la Palabra " a lo largo de su caminar (Lc 24,25-27).

 Al desaparecer de su vista después de cenar juntos, los dos discípulos, recuperados por su Buen Pastor, se dijeron unos al otro: ¿No ardía nuestro corazón cuando nos hablaba en el camino y nos interpretaba –partía-, las Escrituras? (Lc 24,32).

 

P. Antonio Pavía 

comunidadmariamadreapostoles.com

lunes, 13 de octubre de 2025

Partiendo la Palabra Sl 45 (XI) (Jn 6,63b) "Mis Palabras son Espíritu y Vida"

 


 Miramos a Aquel, en cuyos labios se derrama la Gracia, a Jesús, Palabra del Padre, como le llamaban los primeros cristianos, y también la Gracia del Padre. Juan en su Evangelio dice que Él es la Plenitud de la gracia y la verdad (Jn1,14b).

 Lleno de Gracia y de Verdad, apunta al Resplandor de Dios, que nos santifica.  Sin embargo, el veneno de la mentira de Satanás deforma nuestros corazones.

Recordemos la primera predicación de Jesús en la sinagoga de Nazaret. Los "feligreses" admitieron que las palabras dichas por Jesús, estaban "llenas de gracia"(Lc 4,22). Sin embargo, inmediatamente se echaron atrás, pues al no tener que esperar ya al Mesías, ya no tenían excusa para no convertirse; había llegado el tiempo de recibir gracias al Evangelio, un corazón nuevo, como se había profetizado (Ez 36,25-27). Vieron inasumible eso del cambio del corazón. Lo de los rezos lo asumían, lo del cambio del corazón no, porque en su interior sabían que un corazón nuevo, supondría un cambio en su relación con Dios; tendrían que desechar las tibiezas y mediocridades a las que estaban abrazados... De ahí su rechazo a Jesús, que aumentó más y más hasta que fue Crucificado.

Rezar y rezar está muy bien...siempre que lo hagamos para tener la Sabiduría que emana del Evangelio. Sabiduría y Fuerza que dando un vuelco a nuestro corazón nos posibilitan llegar a ser Discípulos de Jesús. Si, para esto murió y resucitó Jesús, para darnos el Evangelio que cambia nuestra forma de ser y.…¡¡¡ Nuestra forma de rezar!!!! (Jn 3,23-24).

 

P. Antonio Pavía 

comunidadmariamadreapostoles.com

 

sábado, 11 de octubre de 2025

Partiendo la Palabra Dm. XXVIII (Lc 17,11-19) Jesús, limpia mi corazón

 



 Diez leprosos van al encuentro de Jesús suplicándole que les cure. Jesús les dice que vayan a los sacerdotes, como indica la ley (Lev. 14,1...) Se ponen en camino y de pronto se ven curados. Uno de los diez se volvió donde Él y le adoró, reconociéndole como el Hijo de Dios. Dijo entonces Jesús: Solo tú has vuelto ¿Y los otros nueve? Y añadió: Tú fe te ha salvado.

La Catequesis de este Evangelio es muy fuerte.

 De nada sirve curarse la lepra exterior -las apariencias- si persiste la interior, la del alma. La mirada de Dios traspasa las apariencias; alcanzan el corazón. A los nueve que se vieron curados por fuera ya les pareció suficiente, son aquellos a los que Jesús llama necios, en el Evangelio. Necios porque no les importa el antro de maldad: mentiras, envidias, avaricia, vanidades...etc. que pululan en su corazón como dice Jesús (Mc 7,20-23). El que volvió donde Jesús, nos recuerda a aquel 10 por ciento de israelitas que permanecieron fieles a Dios mientras que el otro 90 por cien que en Babilonia se adaptaron a los ídolos. 

Dios llamó, a ese 10 por ciento "mis pobres” Los Anawin, y su Hijo les dio el Nombre de "Pobres de espíritu" (Mt 5,3) Estos son inmensamente Amados por Dios porque viven a contracorriente del mundo, Amadísimos por Él, porque escogieron para su alma, a Jesús y su Santo Evangelio...que son inseparables.

 

P. Antonio Pavía 

comunidadmariamadreapostoles.com

 

miércoles, 8 de octubre de 2025

Partiendo la Palabra Sl 45 (X) "Mis Palabras son Espíritu y Vida" (Jn 6,63 b)

 



 

 Hoy nos fijamos en María de Nazaret; en el título con el que la saludó el Ángel Gabriel, que la hacía acreedora de su Misión: Madre del Hijo de Dios. Título Celeste que desgraciadamente, pasa algo desapercibido: Llena de Gracia, el Señor está contigo.

Con este Título, el Ángel estaba profetizando, el sello de identidad de todos los Discípulos de Jesús a lo largo de la Historia. Un Discípulo de Jesús acoge confiadamente las Palabras del Evangelio porque sabe que son semillas de Vida y Espíritu, salidas del corazón de Dios hacia su Hijo (Jn 12,49-50) Es por ello que San Pablo, en su conjunto, las llama: ¡El Evangelio de la Gracia! (Hch 20,24).

 El que acoge el Evangelio de Jesús en sus entrañas, emprende   un camino glorioso con Él, su Buen Pastor, hacia el Padre. (Jn 1O, 1...).

 Al cumplir con Jesús, "Palabra a Palabra", la voluntad del Padre, se hace acreedor " salvando las distancias” del mismo título que María recibió del Ángel: Lleno de Gracia, El Señor está contigo".

 Esta es la Gloria Inmortal que Jesús reserva para sus Discípulos: ¡¡ Llenos de Gracia, llenos de Dios!! Este es nuestro Tesoro Incorruptible...los Buscadores de Dios lo reciben de Él.

 

P. Antonio Pavía 

comunidadmariamadreapostoles.com

 

lunes, 6 de octubre de 2025

Partiendo la Palabra Sl 45 (IX) "Mis Palabras son Espíritu y Vida" (Jn 6,63b)



 Tú Gracia vale más que la vida, exclamó, como pudimos ver en el texto anterior, el rey David.

Acercamos esta exultación, al signo de identidad propuesto por Jesús a quienes desean seguirle como discípulos suyos. "Quien pierda su vida por mí y por el Evangelio, la salvará.  (Mc 8,35b.).

 Fijémonos bien; los discípulos de Jesús, no son, o no somos, personas con querencia a una ascesis tan inhumana como peligrosa. Le seguimos porque por nuestra vinculación al Evangelio, nos da su Sabiduría y su Fuerza para descubrir que estar, en nuestro paso por el mundo, con Él, es el Tesoro de todos los tesoros, ¡¡¡y en cuanto tal... ¡Irrenunciable!

 Hicimos opción por el Tesoro Eterno frente a tesoros corruptibles (Lc 12,3-34). Hemos abierto los brazos de nuestra alma a... Amar a Dios y ser Amados por Él, como proclamaban gozosos los primeros cristianos. 

Cuando a veces nos hemos entregado a tesoros corruptibles, la misma sensatez del alma nos daba señales de alerta como diciéndonos: ¿No te cansas de engañarte a ti mismo?

 Seguir a Jesús no significa renunciar sino saber escoger.

 

P. Antonio Pavía 

comunidadmariamadreapostoles.com