Es impresionante ver cómo todas las
situaciones del hombre en esta vida, están
dispuestas en los Evangelios. Si todo el mundo Los leyera…
Bendito Libro que no sólo contesta a
tus preguntas sino que también te consuela y alienta en las más graves
circunstancias.
El elegido de Dios, Francisco, cuando
le preguntaban algo sobre qué hacer o cómo hacer, él habría el Libro por
cualquier página y les daba la respuesta.
Nosotros no lo hacemos…
Nos creemos dueños de muchas
situaciones que no podemos abordar y nos vamos al psiquiatra o al psicólogo y,
puedo asegurar que si tuviéramos Fe, estos profesionales no harían falta
excepto para las enfermedades de la psique.
La depresión y la ansiedad es la
consecuencia de la falta de Fe; nadie debería sufrir estos trastornos que hoy agobian
al mundo -enfermedades crecientes-, pero no se Le escucha…
El Libro, muchas veces, te resuelve el
conflicto al momento y otras, cuando Él lo cree conveniente así nos hinchemos a
rezar. Siempre por un bien mayor o por una causa especial.
Dios mira el camino de los hombres
hacia la eternidad, no se para en los caminos de la tierra -esos que nos gustan-
a no ser que te lleven a un fin o designio.
Si tuviéramos Fe, nada nos hundiría; si
tuviéramos Fe, la vida sería más fácil y sencilla; si tuviéramos Fe como
Francisco, yo no estaría escribiendo…
Leer a Dios y a Pablo Apóstol, son la
clave para entender la vida. Dios habla en directo, Pablo desde la FE y
experiencia con Jesús ¿Qué más necesitamos?
Nada de psicólogos…
Emma Díez Lobo
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