África
África ¿Cuándo vas a despertar? Yo mandaba sellos para ti, yo postulaba para
ti… Era una niña y ya pensaba en ti. Crecí ayudándote como más de medio mundo,
pero mi abuelo siempre me decía: “África duerme”...
Vuestros
cuerpos se consumían, vientres hinchados, madres sin leche, muerte y miseria sin nombre… ¿Por qué no
despiertas África? Eres el continente más bello y favorecido del mundo, eres el
pedazo de tierra dónde sus atardeceres rojizos claman al cielo, más no abres
tus ojos ¿Qué te pasa África?
“Erais”
antes que todos, erais la vida por excelencia, el conocimiento y el valor. El
mundo estaba vacío sin ti… Dime África, cuando vuestros hermanos cruzaron
continentes y os dejaron ¿Qué os paso?
Mira que son miles de miles de años más jóvenes que vosotros y…
Civilizaron toda la tierra ¿Por qué tú no lo hiciste? Tenías todo en tu mano, eras
el “principio” del hombre, de la riqueza, del fuego y la sabiduría… Dios te
puso allí.
No
era necesario aclarar vuestra piel para no morir, no lo era. Pero entraste en
un sueño incomprensible y os quedasteis en los comienzos del saber… Tanto, que
llegó un día en que los “civilizados” os robarían bienes, hombres y mujeres; os
esclavizarían… Y ahora lloras sin destino; abandonas la tierra para emular la
civilización que vosotros comenzasteis haces millones de años… ¡No puedo
entender mi origen aún dormido, no puedo!
Vuestras
“almohadas” os han hecho ser los más pobres del mundo ¿Por qué África? Os hemos
mandado a Dios con equipaje de futuro hace más de 200 años, pero en vuestro
letargo no habéis aprendido. Os aniquiláis en guerras absurdas con armas de
blancos, también hachas y balas para mi Dios, Él “muere” allí entre vosotros y
por vosotros… ¡Cuántas “escuelas” os hicieron, cuántos niños vivieron!
Ahora
os veo navegar hacia España o Italia dejando una miseria incomprendida…
Ilusiones desconocidas que nunca fueron verdad, anhelos tristes que el mar del
Mediterráneo se tragaría por siempre; sí, el océano esconde vuestras vidas,
desesperanzas y angustias.
Dime
Dios ¿Qué le pasa a África? Haz que despierte… ¡Arriba vuestras banderas con
humildad y honor! Es hora de gritar, pero no en los mares… Sois mi origen y mi
Dios os eligió para poblar la tierra. Dejad las armas, echad a los que os
oprimen y luchad por vuestro gran continente, el más bello del mundo donde las
manos de Dios no faltarán mientras despertáis.
¡No llores pues, África querida, abre tus ojos
rasgados y junto a “esas manos de Dios”, ayuda a ser la luz de tus pueblos!
Emma Diez Lobo
No hay comentarios:
Publicar un comentario