jueves, 21 de febrero de 2019

Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?




        “Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?” Jesús nos interpela directamente, quiere oír de nuestra propia boca qué opinamos, qué creemos, por qué lo seguimos, hasta dónde llega nuestra fe. Nuestra respuesta, como en su día la de Pedro, tiene mucha importancia para Él y quiere que con nuestra propia reflexión calibremos y estemos seguros de las consecuencias de su seguimiento.

        A cada uno nos pregunta: para ti, ¿quién soy? Ante esta pregunta tan directa y personal no cabe nada más que una respuesta sincera y personal. Cada cual en el instante de escuchar la interpelación tendrá que dar su respuesta y esta en circunstancias normales deberá coincidir con la de Pedro. Pero ¿y cuando nos encontramos en horas bajas? ¿qué respuesta damos al Señor? En este caso a lo mejor tendrá que increpar nuestra actitud como al segundo Pedro. Entonces avergonzados solo nos quedará que decirle que tenga en cuenta que somos hombres y por tanto nos cuesta pensar como Dios, que tenga paciencia con nosotros, que no desespere ni nos abandone y nos conceda una nueva oportunidad.

        Cada cual a su modo y según su conciencia, porque no lo podemos engañar, le tendremos que dar nuestra respuesta personal e intransferible: Un amigo al que acudo de vez en cuando si me vienen mal dadas. Un buen amigo al que todo se lo cuento y al que acudo cuando tengo alguna necesidad porque nunca defrauda. El amigo íntimo que nunca me falla, que siempre está dispuesto, que me aconseja lo mejor, que aguanta sin inmutarse mis estupideces porque es congruente en su amor. Es mi Dios y Señor al que todo le debo y como a tal lo tengo que tratar con respeto y proclamarlo sin miedo ni vergüenza ante los demás y además es este amigo íntimo, confidente y paciente con mis pecados que ha demostrado hasta saciedad, derramando hasta la última gota de su sangre, que me ama y al que amo de todo corazón.

        Ojalá y esta última sea mi respuesta no retórica, sino verdadera y sentida.

Pedro José Martínez Caparrós

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