Los Dogmas de la Fe católica no se
discuten. El purgatorio y el infierno existen pese a quien le pese. Con la
Muerte de Cristo se abrió el cielo a la humanidad, pero ni es gratis ni es
directo entrar… Solo Pedro tiene las
llaves por mandato de Dios (Mt 16, 13-20).
La culpa del pecado se perdona en
confesión (Pedro), la pena del pecado se redime en el Purgatorio. Esto es el
significado de salvación.
La Misericordia infinita de Jesús, se
gana en la tierra y desde aquí nuestra salvación. Ve a “Pedro” y consíguela. Ni
tus plegarias ni tus súplicas a Dios en casa, te absolverán. Necesitas te
imponga las manos del Espíritu Santo.
¡Estad alertas! Y no atendáis a quienes
niegan -incluso algunos religiosos- el purgatorio y el infierno; semejante error
de “interpretación propia” podría llevarte a dudar de la Justicia implacable de
Dios.
Leed al Padre Pio, a Jacinta en su
visión del infierno, a Santos con experiencias de personas en el purgatorio y
leed el Evangelio, sabréis la verdad de la mentira que creéis u os hacen creer.
Pablo fue un asesino pero se salvó;
“Mari Puri” vivía su vida sin matar a nadie ni robar y se condenó… “Estad preparados, no sabéis el día ni la
hora” (Mt 24, 42-51).
Emma
Díez Lobo
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