“El silencio no se limita a la ausencia de
palabras, sino que nos disponemos a escuchar otras voces: la de nuestro corazón
y, sobre todo, la voz del Espíritu Santo”, dijo el papa Francisco este
miércoles 10 de enero de 2018 en la audiencia general ante 7 mil fieles y
peregrinos congregados debido al invierno en el Aula Pablo VI del Vaticano.
El Papa explicó
hoy el significado del canto del gloria y de la oración
colecta que forman parte de los ritos introductorios de la Santa
Misa.
En este
contexto, reiteró que orar durante la Eucaristía – por invitación del
sacerdote – es tomar conciencia de estar en la presencia de Dios, además de
manifestar desde el fondo del corazón las intenciones personales y participar
activamente en la Misa.
Así, el Papa
continuó con la serie de catequesis sobre la Eucaristía e insistió en el
silencio que ayuda a la oración. Incluso invitó a meditar sobre los textos de
la Biblia y la homilía aún después de terminar la celebración.
El canto del
gloria
“El canto del
gloria comienza con las palabras de los ángeles en el nacimiento de Jesús en
Belén”, explicó. De esta forma, se continúa con “aclamaciones de alabanza
y agradecimiento a Dios, que es Padre, Hijo y Espíritu Santo”.
Indicó que el
canto del gloria representa, “en cierto modo, un abrirse de la tierra al cielo
en respuesta al inclinarse del cielo sobre la tierra”.
Oración colecta
Luego, el Papa
señaló que tras el Gloria viene “la oración llamada colecta”.
“Con la
expresión “oremos”, el sacerdote invita al pueblo a recogerse un momento en
silencio, para que cada uno tome conciencia de estar en la presencia de Dios y
formular en su espíritu sus deseos”, añadió.
En las pasadas
audiencias generales sobre el tema, Francisco se enojó con quienes usan
celulares en la Misa o chismorrean, en esta ocasión subrayó que “hacer
silencio significa disponerse para escuchar la voz de nuestro corazón y sobre
todo la del Espíritu Santo”.
“Durante el
acto de penitencia y después de la invitación a la oración”, el silencio “ayuda
a la meditación; después de la lectura o la homilía, es un llamado a meditar
brevemente sobre lo que se ha escuchado; después de la Comunión, favorece la
oración interior de alabanza y súplica”.
Entonces,
“antes de la oración inicial, el silencio nos ayuda a reunirnos en nosotros
mismos y pensar por qué estamos allí. Aquí está la importancia de escuchar
nuestra alma y luego abrirla al Señor”.
Confía a Dios
dolor, alegría, cansancios
“Tal vez –
comentó- vengamos de días de trabajo, de alegría, de dolor, y queremos decirle
al Señor, para invocar su ayuda, para pedirle que esté cerca de nosotros;
tenemos familiares y amigos que están enfermos o que están pasando por pruebas
difíciles; deseamos confiarle a Dios el destino de la Iglesia y del mundo”.
Por eso, necesitamos
el “silencio antes de que el sacerdote, recogiendo las intenciones de cada uno,
exprese en voz alta a Dios, en nombre de todos, la oración común que concluye
los ritos de introducción, haciendo precisamente la “colección” de las
intenciones individuales”.
El recuerdo del
alma
En este
sentido, el Papa recomendó a los sacerdotes que conserven este momento de
“silencio y que no tengan prisa: “recemos”, y que sea silencioso. Recomiendo
esto a los sacerdotes. Sin este silencio, corremos el riesgo de descuidar el
recuerdo del alma”.
¿Cómo está
compuesta la oración colecta? Primero se trata de una “invocación del nombre de
Dios, y en la que se hace memoria de lo que él ha hecho por nosotros, y en
segundo lugar, de una súplica para que intervenga”.
El “sacerdote –
prosiguió – recita esta oración con los brazos abiertos imitando a Cristo sobre
el madero de la cruz. En Cristo crucificado reconocemos al sacerdote que ofrece
a Dios el culto agradable, es decir, el de la obediencia filial”.
Al final,
saludó cordialmente a los peregrinos en varios idiomas. “Pidamos a la Virgen
María que interceda por nosotros para que la Santa Misa sea de verdad una
auténtica escuela de oración, en la que aprendamos a dirigirnos a Dios en
cualquier momento de nuestra vida. Que el Señor los bendiga. Muchas gracias”.
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