¿Lo estás viendo?
Pues no han tenido precaución en esto del Covid.
Ignoro si es por ignorancia o maldad, pero me
da igual, morimos a raudales. A Ti Señor también te mataron sin piedad, lo malo
es que ninguno de los que se va de aquí arrampla con los pecados del vecino, no
no, de aquí nos vamos con los propios que pesan toneladas y ya.
“Me acuerdo” de que
Tú no te defendiste, ni hiciste nada
para librarte de tanta infamia, pues, imposible imitarte en algo; todo lo
contrario, la crítica y el reproche, están a la orden del día ¡Es horroroso!
La fuerza se nos va
por la boca y la mente. ¡No sabes cómo echo de menos tu sabiduría! Te escucho y
te leo en mi refugio pero en cuanto veo la TV… Ahí me tienes denunciando toda
injusticia y tanta muerte que pudo haberse evitado.
Señor ilumina las conciencias
de los malos y entierra por algún lado el ansia de Poder a precio de muerte.
Ya no es tiempo de
llorar y culpar, es el fin de los tiempos para muchas almas.
Te pido Señor, aunque
en sus vidas no tuvieran presente aquella frase lapidaria: “Estad preparados, no sabéis el
día ni la hora”, que al menos nuestras oraciones y su dolor sirvan para
que, con tu Misericordia, se salven.
Me da tanta pena…
Pero sé que no tanta como a Ti.
Emma Díez Lobo
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