- Me arrodillo y Dios plasma una cruz
en mi frente
- No te olvides de quien eres ni de lo
que eres…
- Por un lado me encanta, por otro, me
voy hecha una pena…
- ¿Por qué esa tristeza?
- Porque quiero la vida que me
regalaste. Amo a mis hijos y no me queda mucho para convertirme en pura ceniza…
- No te aflijas, sólo lo hago para que
no vivas como si nunca te fueras a ir…
- Lo sé y Te pido que esta cruz “gris”
de mi frente, no me haga olvidar que he de llevarTe trigo sin maleza.
- Así será cada año ¡Anda y vete a casa
con la verdad de tu corta existencia! No
quiero que te desanimes, sino que recojas y recojas para enseñarme tu cestorro lleno.
¿Te gusta “el campo”? Pues ahí te lo dejo con millones de oportunidades
estupenda. “El campo” te espera…
- ¡Pero primero tendré que plantar,
digo yo!
- ¡Ojo! no vale plantar a lo loco, planta
bien que después todo se seca… Si lo haces bien, Yo te enviaré el agua, no te
preocupes por eso.
- Venga, yo el grano y Tú el agua.
- Eso es, y lleva orgullosa la cruz
gris en tu frente
- ¡Ya podía haber sido azul como el
cielo, jopé!
- Eso no es cosa Mía… ¡Pero qué más te
da!
- Pueeeeees, no me da igual
- Pueeeeees, no todos escogen el cielo…
Emma Díez Lobo
No hay comentarios:
Publicar un comentario